Hoy bajo la misma luna que nos vio crecer, bajo la misma luna que nos escucho aullar, es imprescindible recordarte. Tus azules ojos, tu denso pelaje blanco y negro, tu necia y desafiante personalidad, tu cariño incondicional.
Hoy a kilometros de distancia te recuerdo... te extraño, aquel que defendí sacrificando bienestar y que al final defraude y lo tuve que olvidar, aquel que sin importar lo que pasara estaba ahi, para darme su cariño, distraerme de la fria realidad, o tan solo brindarme su compañia.
Aquel con quien camine tantas veces solitario, algunas bajo la lluvia, otras en el intenso calor, otras simplemente caminando como queriendo escapar. Amigo fiel, al que observe crecer, que crecí con el, reí con el, incluso llore con el.
Aquel que al verme decaido y triste me sentía, se acercaba y me lamía, aquel que valio mas espiritualmente que cualquier otro de su lujosa raza.
Te he visto despues de marcharte, has madurado, incluso creo que más que yo; estas con tu nueva manada, eres diferente, has crecido, me recuerdas, pero no es lo mismo. No es lo mismo para ti, no es lo mismo para mi.
Quiza estes mejor, no lo se, solo deseo que sea así.
Marcaste una etapa de mi vida, una de las mas importantes, y siempre, ahi estuviste. Hoy bajo la misma luna; bajo la que has madurado, te recuerdo. Hoy bajo la misma luna, aúllo de nostalgía, de tristeza; te extraño.
Quien diria que es verdad: el mejor amigo del hombre es el perro...
